Recientemente se hizo bastante popular la noticia de que el Tesla Model 3 es el peor coche en las pruebas de la ITV en Dinamarca, un dato que sorprende pero que es necesario ponerle en contexto para entender por qué ocurre esto.
Uno de los mayores atractivos de un Tesla es que no tiene motor de combustión, lo que elimina muchas piezas mecánicas sujetas a desgaste: no hay aceite que cambiar, no hay correas de distribución, no hay embrague. Esto ha generado la idea de que un Tesla no necesita mantenimiento.
- Los propietarios de Tesla tienden a visitar menos el taller, ya que el coche no les da señales evidentes de averías.
- No hay revisiones periódicas obligatorias, como ocurre con los coches de combustión, lo que hace que muchos ignoren la importancia de realizar comprobaciones básicas antes de la ITV.
El resultado es que, cuando llega el momento de la inspección, los defectos acumulados salen a la luz y el vehículo no pasa la prueba.
Los fallos más comunes de Tesla en la ITV
Según datos de centros de inspección, los fallos más habituales de los Tesla que no superan la ITV son:
- Neumáticos en mal estado: Al ser coches pesados y con aceleración instantánea, los Tesla desgastan los neumáticos más rápido de lo que muchos propietarios creen. Un dibujo por debajo del mínimo legal (1,6 mm) es motivo de suspenso inmediato.
- Frenos poco eficientes: Los Tesla usan frenado regenerativo, lo que significa que los frenos tradicionales apenas se usan en el día a día. Como resultado, las pastillas y discos pueden cristalizarse o deteriorarse por falta de uso, perdiendo eficacia en la prueba de frenado.
- Problemas en la suspensión: El peso de la batería puede generar desgaste en los amortiguadores y rótulas, algo que pasa desapercibido para muchos conductores hasta que es demasiado tarde.
- Defectos en luces y señalización: Al no revisar sus coches antes de la ITV, muchos propietarios se presentan con luces fundidas, mal alineadas o intermitentes defectuosos.
- Fallos en dirección y alineación: Al ser vehículos con una respuesta rápida en la conducción, cualquier desajuste en la alineación o en la dirección puede notarse en la inspección, provocando un suspenso.
¿Cómo evitar que tu Tesla suspenda la ITV?
Aunque Tesla no requiera mantenimientos tradicionales, eso no significa que sea un coche libre de revisiones. Antes de llevarlo a la ITV, es recomendable hacer una revisión preventiva en un taller especializado o al menos revisar estos puntos:
- Neumáticos: Verifica la profundidad del dibujo y la presión recomendada por el fabricante.
- Frenos: Pisa el freno con fuerza en un tramo seguro para comprobar si la respuesta es firme o si notas vibraciones.
- Luces: Revisa todas las luces, intermitentes y antinieblas.
- Suspensión: Si notas ruidos extraños al pasar por baches, podría haber problemas.
- Dirección: Asegúrate de que el coche no se desvía al soltar el volante en una recta.
El mito del coche sin mantenimiento es un arma de doble filo, y cada vez más propietarios lo descubren cuando se enfrentan a un suspenso en la ITV.