El mercado de los eléctricos compactos ha dejado de ser sinónimo de renuncias. Con precios que arrancan por debajo de los 20.000 euros (antes de ayudas), tanto el nuevo BYD Dolphin Surf como el Dacia Spring 2025 se disputan un hueco entre los conductores que buscan un coche urbano eléctrico sin hipotecarse en el intento. Pero más allá del precio, las diferencias son claras.
El Dacia Spring ha sido durante años el referente en cuanto a precio bajo y simplicidad. Con 3,70 metros de largo y un maletero de 308 litros, sigue siendo uno de los urbanos más compactos del mercado. En su versión básica ofrece 45 CV, batería de 26,8 kWh y 225 km de autonomía WLTP. Y aunque ahora hay una versión más potente de 65 CV, ambas comparten batería y rango. La carga rápida se limita a 30 kW en corriente continua, lo que alarga el tiempo para pasar del 0 al 80% hasta casi una hora (56 minutos, según datos de la marca).
Sus precios, sin ayudas, arrancan en 17.890 euros para el acabado Expression. Con el Plan Moves III (hasta 7.000 € si se achatarra un coche antiguo), el Spring puede bajar a poco más de 10.000 euros, una cifra que aún hoy pocos eléctricos pueden igualar.
Pero BYD ha llegado con ganas de disputar esa etiqueta de “eléctrico asequible” y lo ha hecho apostando fuerte por lo que el usuario medio ya espera de un coche urbano moderno. El Dolphin Surf mide 3,90 metros —más largo que el Spring y el Dolphin Mini americano— y ofrece tres versiones que apuntan a perfiles de conductor distintos.
La versión Active (19.990 € sin ayudas) parte con batería LFP de 30 kWh, 87 CV y una autonomía de 220 km. Su ventaja está en la carga rápida: hasta 65 kW, lo que permite recuperar del 30 al 80% en solo 25 minutos. Además, ya incluye de serie los sistemas ADAS exigidos por la normativa europea.
El escalón intermedio, llamado Boost (23.900 €), sube a 156 CV y 322 km de autonomía, con una batería de 43,2 kWh. Y el acabado superior, Comfort (26.940 €), mantiene esa potencia pero prioriza la aceleración (0-100 km/h en 9,1 s) y mejora en equipamiento: asientos calefactados, luces LED y cristales tintados, entre otros.
Con las ayudas, el Dolphin Surf Active puede quedarse en 12.900 euros, y lo convierte en una alternativa difícil de batir si se buscan prestaciones y recarga rápida. Incluso frente al renovado Spring, que aunque sigue siendo el más barato, no ha dado el salto cualitativo que BYD sí ha planteado.
El escenario ayuda a esta batalla de eléctricos económicos. En los primeros cinco meses de 2025, las matriculaciones de eléctricos puros en España han crecido un 8,6%, pero aún suponen apenas el 5,7% del mercado total (ANFAC, mayo 2025). El precio sigue siendo la barrera, y ahí es donde modelos como estos pueden marcar la diferencia.
Además, el precio del kWh doméstico se ha estabilizado en torno a los 0,15 €/kWh en horario valle, lo que hace que recorrer 100 km con coches como el Dolphin Surf cueste menos de 3 euros. Una ventaja frente a cualquier térmico del segmento A o B.
El BYD Dolphin Surf, con su diseño más trabajado y sus cifras de potencia, recarga y autonomía, busca desmarcarse de los eléctricos “baratos pero justos”. Si el precio sigue siendo el argumento de peso, el Spring sigue en la pelea. Pero si se valora algo más que eso, el coche chino parece estar en otra liga.