Tesla se prepara para lanzar la versión FSD V14 en un plazo aproximado de seis semanas. Elon Musk ha adelantado que este salto supone multiplicar por diez el número de parámetros del sistema actual, lo que permitirá una interpretación más precisa del entorno y una respuesta más natural ante situaciones complejas.
Las mejoras previstas incluyen una conducción más suave, maniobras más seguras en cruces y rotondas, mayor capacidad para anticipar la trayectoria en vías rápidas y mejor adaptación a situaciones imprevistas como peatones en zonas no señalizadas o trabajos en carretera. También se esperan avances en la navegación por aparcamientos, con detección más afinada de plazas y zonas de carga y descarga.
Uno de los cambios más esperados es la reducción de las alertas y recordatorios dirigidos al conductor. La compañía planea suavizar estas notificaciones una vez que se confirme que el nuevo sistema mantiene un alto nivel de seguridad en diferentes condiciones de tráfico y climatología. Aun así, el usuario seguirá teniendo que supervisar la conducción y estar preparado para intervenir en momentos puntuales.
La nueva arquitectura de FSD V14 ha sido entrenada con una cantidad muy superior de datos reales y simulados, con el objetivo de que el vehículo gestione mejor las situaciones poco frecuentes y reduzca los errores de predicción en interacciones con otros coches y peatones.
El lanzamiento está previsto para finales de septiembre, siempre que las pruebas finales no revelen problemas que obliguen a retrasar la distribución a los primeros usuarios. Si el calendario se mantiene, esta versión podría convertirse en el punto de referencia del sistema de conducción asistida más avanzado de Tesla hasta la fecha.