Tesla está ultimando la llegada de una cámara frontal integrada en el paragolpes de su berlina eléctrica más popular. Se trata de un cambio que, a primera vista, parece menor, pero que puede marcar una gran diferencia tanto en maniobras cotidianas como en el desarrollo de funciones avanzadas de conducción autónoma.
Este movimiento llama la atención porque el Model 3 Highland, lanzado hace apenas unos meses, no contaba con este elemento, mientras que otros modelos de la marca ya incorporan soluciones similares. La ausencia de sensores ultrasónicos en los últimos Tesla había dejado un punto ciego en la zona frontal, especialmente a la hora de aparcar o circular en entornos reducidos. Con la nueva cámara, esta limitación quedaría resuelta.
Un extra para el día a día y para el futuro autónomo
En la práctica, la cámara permitirá al conductor tener una visión directa del frente del coche, algo especialmente útil en bordillos altos, entradas estrechas o garajes complicados. Además, el sistema Tesla Vision, que se basa exclusivamente en cámaras para interpretar el entorno, podrá beneficiarse de una cobertura más completa, mejorando funciones como el aparcamiento automático o el Smart Summon.
El añadido también se alinea con los planes de Tesla para seguir perfeccionando el Autopilot y el Full Self-Driving (FSD). Una vista adicional en el frontal aportará más datos al sistema, algo clave para que el vehículo pueda anticipar obstáculos y tomar decisiones con mayor precisión. Esto será fundamental en entornos urbanos, donde la interacción con peatones, bicicletas y otros vehículos exige una percepción milimétrica.
Posible actualización para coches ya vendidos
Aunque la incorporación de la cámara se estrenará en las nuevas unidades que salgan de fábrica, se espera que Tesla ofrezca la posibilidad de instalarla en modelos Highland ya entregados. Este tipo de retrofits es algo que la compañía ha hecho en el pasado con otros componentes, lo que permite a los propietarios beneficiarse de mejoras sin tener que cambiar de coche.
Avistamientos y pruebas en carretera
En las últimas semanas, varios prototipos del Model 3 han sido vistos circulando con una cámara extra en el paragolpes. Estos vehículos de prueba servirían para calibrar y validar el nuevo hardware antes de su lanzamiento oficial. No se descarta que la cámara juegue un papel importante en futuros desarrollos como la red de robotaxis que Tesla tiene en mente.
En definitiva, la adición de una cámara frontal en el Tesla Model 3 no es solo un detalle estético o un extra para aparcar con comodidad. Es una pieza más en el complejo puzle de sensores que, poco a poco, acercan al coche eléctrico más vendido de Tesla a un futuro de conducción totalmente autónoma.
