Recientemente he leído en el foro de Club Tesla en España un incidente con los limpiaparabrisas automáticos que podría haber costado un serio disgusto. Este no es un incidente aislado. Diversas fuentes y usuarios han expresado su frustración con el modo “Auto” de los limpiaparabrisas en los modelos Tesla.
Causas principales:
La estrategia que utiliza Tesla pasa por la filosofía llamada “Vision Only” (solo cámara) para muchas de sus funciones de asistencia, incluidos los limpiaparabrisas automáticos. En lugar de un sensor dedicado de lluvia o humedad (algo que durante décadas ha demostrado su eficacia), el vehículo intenta detectar las gotas de agua o la “condición de lluvia” mediante las cámaras del sistema de conducción asistida.
Estas cámaras, colocadas principalmente para detectar vehículos, carriles, peatones y otros obstáculos, no están optimizadas para ver gotas de lluvia pequeñas o cambios rápidos de visibilidad en la zona inferior del parabrisas. Los expertos lo señalan como un problema de campo de visión, desenfoque o sensores que no están calibrados para esa tarea secundaria.
En situaciones de lluvia repentina o granizo o incluso salpicaduras de otro vehículo, la cámara puede tardar en reaccionar o tomar una decisión errónea de frecuencia del limpiado. En condiciones ligeras, muchos usuarios reportan que el sistema ni siquiera actúa; en condiciones fuertes, que actúa demasiado tarde o a una velocidad insuficiente.
Además, al utilizar control por software y cámara, los fabricantes de palancas físicas y botones tradicionales (que son inmediatos y táctiles) quedan desplazados, lo que añade un retraso de operación humano cuando el conductor tiene que buscar la rueda/táctil en el volante o en la pantalla para cambiar manualmente. En el incidente citado, el usuario reconocía que “me he puesto a pelear con los mandos del volante para ponerlo en velocidad máxima manualmente… me he llegado a acojonar vivo”.
Finalmente, aunque Tesla realiza actualizaciones OTA (over‑the‑air) para mejorar diversos sistemas, este tipo de funcionalidad tiene un componente hardware y de calibración que puede que no se solucione únicamente con software.
Implicaciones en la seguridad vial
El testimonio y los estudios indican que este fallo no es solo una molestia: puede tener consecuencias graves. Comentaristas incluso han sugerido que este tipo de sistema podría afectar la evaluación de seguridad de los vehículos. En el foro se comenta:
“Qué bueno que ha quedado en un casi me fostio ‘solamente’. Yo por estas cosas, si fuese EuroNCAP le quitaba una o dos estrellas a los M3/MY sin botón dedicado a los limpias.”
En resumen:
Con visibilidad reducida, la velocidad, la distancia de frenado y la capacidad de reacción se deterioran significativamente. Si el sistema de limpiaparabrisas no responde al instante, el conductor puede perder segundos críticos.
La distracción añadida de tener que buscar y activar manualmente el sistema (o cambiar de modo automático a manual) en plena emergencia complica aún más la situación.
Hoy en día muchos sistemas de conducción asistida (como el control de crucero adaptativo, frenada automática, etc.) dependen de la visibilidad del parabrisas. Un fallo en el limpiaparabrisas puede, por tanto, afectar otros sistemas de seguridad activa.
Desde el punto de vista del usuario, existe una pérdida de confianza en la funcionalidad “automática”, lo que puede llevar a que muchos conductores opten por modo manual permanentemente, perdiendo una de las ventajas de los sistemas modernos.
¿Qué pueden hacer los propietarios de Tesla mientras tanto?
Dado que la solución definitiva (mejor hardware, calibración o sensor dedicado) puede tardar, aquí algunas recomendaciones prácticas para conductores de Tesla que quieran prepararse mejor ante lluvias bruscas:
Familiarízate con el mando o rueda que controla los limpiaparabrisas antes de conducir en condiciones complicadas. Saber dónde está el ajuste y cómo activarlo rápidamente puede marcar la diferencia.
Considera mantener el modo en manual de limpiaparabrisas en lugar de confiar únicamente en “Auto”, especialmente en trayectos donde la lluvia es impredecible. En el foro del Club Tesla, varios usuarios recomiendan este enfoque.
Mantén el parabrisas limpio por dentro y por fuera, sin neblina, suciedad o marcas, ya que los sistemas de detección visual funcionan peor con superficies sucias o empañadas.
Lleva la velocidad de marcha adaptada a la visibilidad, especialmente si ves nubes de lluvia avanzando o te acercas a túneles, zonas de sombra o autopistas con camiones y salpicaduras. Así tendrás más margen si el limpiaparabrisas no responde al instante.
Verifica que el vehículo esté actualizado al último firmware, ya que Tesla puede haber liberado mejoras en la lógica de detección de lluvia. Aunque no garantice solución total, puede mejorar el funcionamiento parcial.
Reporta el problema a Tesla (si lo percibes) a través de la app o del servicio técnico. Cuantos más usuarios informen estos escenarios críticos, mayor presión habrá para que la marca aborde la cuestión.
Estado de la solución en Tesla
Aunque Tesla no ha publicado un plan público detallado únicamente para el sistema de limpiaparabrisas automáticos, las investigaciones señalan que parte del problema radica en la estrategia “Vision Only” que la empresa ha adoptado para reducir sensores físicos y centralizar funcionalidades en cámaras + software.
Tesla reconoció en un tuit que el sistema de limpiaparabrisas “usaba una red neuronal” y que estaba trabajando para “usar múltiples cámaras en lugar de solo una” para mejorar la detección. No obstante, dado que estas mejoras implican tanto software como posible hardware adicional o recalibración, la solución completa puede tardar meses o varios ciclos de actualización.